CÓMO SOBREVIVIR A LOS SUSPENSOS DE TUS HIJOS

CÓMO SOBREVIVIR A LOS SUSPENSOS DE TUS HIJOS

UNA GUÍA REALISTA Y PRÁCTICA PARA SABER QUÉ PODEMOS Y QUÉ NO PODEMOS HACER LOS P

5,95 €

  • Editorial: ESPASA
  • Año de edición:
  • Materia: Educación familiar
  • ISBN: 978-84-670-4498-0
  • Páginas: 184
  • Encuadernación: Rústica
  • Colección: Fuera De Colección Y One Shot
  • Idioma: Español

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Cómo sobrevivir a los suspensos de los hijos es una guía realista y práctica que comienza al recibir las notas de los hijos y, para el autor, Carlos Pajuelo, concluye con la “sinfonía del optimismo” de haber superado el complejo en el que a menudo los padres de hijos suspendedores padecen: ¡qué no hemos hecho bien! Y es que ser buen padre o buena madre de un suspendedor es todo un reto familiar y educativo.
Carlos Pajuelo, padre, psicólogo, profesor en la Facultad de Educación de la Universidad de Extremadura y bloguero educativo, aprovecha algo tan frecuente y al mismo tiempo inquietante como los suspensos de los hijos y nos ofrece con una gran carga de buen humor una buena guía para padres de hijos suspendedores o, incluso, no suspendedores.
El título del libro, Cómo sobrevivir a los suspensos de los hijos, puede hacernos intuir un nuevo manual de autoayuda. No es el caso de este libro en el que a partir del suspenso se brinda al lector con un lenguaje llano, directo y dialógico, y gran dosis de experiencia y buen humor, un enfoque nuevo sobre el qué-hacer de su tarea de padres-educadores evitando la asunción de ese fracaso. Los suspensos –dice Pajuelo- no son una hipoteca para los padres sino el resultado de un trabajo mal hecho o no hecho por el hijo suspendedor que es el responsable del suspenso y al que hay que educar en todo momento y lugar; y esa sí que es la responsabilidad de los padres.
Y es que el suspenso no es un estado, ni una condición, no existe el suspendedor nato -nos dice el autor-. Este libro da a los padres, pautas concretas, consejos, buenas razones para llegar a estar orgullosos, sí, de sus hijos suspendedores aunque no de sus suspensos.

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