ELIA Y LAS OLIMPIADAS ESCOLARES

Elia empieza segundo curso de Primaria con un profesor que, por recomendación médica, pasa continuamente las cuentas de colores de un collar. Hacer esto le resulta muy necesario para su tranquilidad, sobre todo cuando debe responder a las preguntas de Pauli, un alumno inteligente pero de carácter un tanto peculiar, que además es el mejor amigo de Elia. El segundo día de clase, el profesor lee una carta donde se le comunica que el colegio ha sido invitado a participar en unas olimpiadas escolares organizadas por la ciudad y debe elegir dos de sus alumnos para presentarlos a las pruebas eliminatorias de selección. Llevar a cabo esta elección, entrenar a los elegidos y el desarrollo de la competición es un proceso que da lugar a una serie de situaciones divertidas aunque también provoca constantes rupturas del collar del profesor por exceso de uso. Escrita en tono humorístico, la historia abunda en detalles surrealistas que conectan de forma muy acertada con la imaginación de los lectores infantiles. El trasfondo de la acción pone de manifiesto los problemas de las familias rotas, en términos realistas, pero la solución que ofrece para la de Pauli no es la más correcta.

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