VÍCTOR Y LOS ROMANOS

En el segundo episodio de sus aventuras, el protagonista narra su llegada al nuevo colegio al que le han trasladado sus padres. A pesar de que dos de sus amigos, los hermanos Mariona y Borja ya están en ese centro y con él también se cambia su mejor amigo, Ramón, esto no impide que el matón de la clase, un repetidor, le haga objeto de un marcado acoso. La obra cuenta el desarrollo cotidiano del curso, centrándose en la asignatura de Conocimiento del Medio cuyo profesor dedica un fin de semana de campamento a escenificar la conquista por parte de Roma de la costa mediterránea de Hispania, estableciendo la provincia Tarraconense. La combinación de texto y viñetas de cómic facilita la asimilación de estos contenidos históricos, así como el hecho de que uno de los personajes se exprese siempre en inglés ayuda a familiarizarse con este idioma. Al margen de esta intencionalidad didáctica, bastante superficial, la trama está enfocada en términos humorísticos, con alguna concesión de un gusto dudoso, que también se manifiesta en las ilustraciones. Por lo que se refiere a su situación familiar, Víctor aparece situado en un hogar un donde conviven con él, hijo único, otros hermanos mayores procedentes de anteriores uniones de sus padres, cuya conducta resulta poco ejemplar.

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