TIEMPO DE VIDA

El autor, narrador y protagonista de esta obra, cuenta la relación con sus progenitores, sobre todo cuando a su padre le diagnostican una enfermedad mortal. A lo largo de la evolución del enfermo durante el tratamiento y hasta llegar al desenlace, refleja los sentimientos de ambos ante el inminente fallecimiento.
Giralt Torrente (Madrid, 1968) ha dado al libro la forma literaria de un relato novelado. Al evocar cómo decidió elaborarlo, anota que "asumí que sólo me era posible escribir sobre mi padre". Así, aunque retrata también a su madre, se centra en su sentimiento de abandono por parte del padre. Ante un tema universal como es la muerte del progenitor, el autor desnuda conductas y sentimientos de unos y otros, reconoce aciertos y admite errores, sin insistencias que pudieran dar a esta obra la apariencia de un "ajuste de cuentas", aunque no faltan los agravios y las decepciones.El hijo, que declara profesar un "esperanzado agnosticismo", no muestra en ningún momento esperanza en una trascendencia, y como tal actúa en varias ocasiones, como con el testamento vital del padre; es hondo el vacío espiritual de los personajes. El estilo, muy cuidado, conciso, combina ritmo rápido y lento según lo que se narre, con repeticiones que marcan una pauta y que en ocasiones son obligadas por la deliberada ocultación de los nombres. La novela resultará de interés para un sector minoritario de lectores.

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