13 DÍAS A MEDIANOCHE

Primera novela de una serie de terror paranormal, llena de fantasmas vengativos y seres demoníacos, que potencian sus poderes hacia los humanos en la fiesta de Halloween. Se centra en Luke, un adolescente de dieciséis años, que lleva una vida normal con su madre en un pequeño pueblo de Inglaterra, hasta que recibe una herencia maldita que pone en peligro su vida. Cuando muere su padre, un nigromante conocido por sus programas de temática paranormal en televisión, y al que no ve desde que tenía seis años, se convierte en su heredero universal; pero no es sólo dinero lo que recibe, sino un legado de ocho fantasmas llamados la hueste que, despertados de la muerte, su padre los mantenía vinculados a su servicio y ahora quieren ser libres. Luke, narrador y protagonista, va desgranando la espeluznante experiencia en que se ve inmerso, al introducirse en su rutina diaria la presencia de estos malignos espectros de consistencia sólida y actuaciones letales. Aunque el personaje principal no resulta del todo convincente por la poca fuerza con que expresa sus sentimientos y emociones, el relato se carga de escenas escalofriantes y macabras, que se ubican en lugares de ambientación siniestra, donde Luke se enfrenta a estos seres que quieren acabar con él y con su madre. Una compañera de clase, marginada y de aspecto gótico, pero capaz de ver fantasmas, se convierte en un personaje interesante al compartir su secreto y ayudarle en los momentos de verdadero peligro. De lectura absorbente, no es un libro para todo tipo de público juvenil por su contenido macabro y diabólico. Junto a elementos mágicos y de fantasía, se practican sortilegios, posesiones y hasta pactos con el diablo, que se presenta despojado de su apariencia tenebrosa, pero al que se toma más en serio que a Dios, del que apenas hay alguna referencia y ésta, algo irreverente.

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