22/11/63

Una misteriosa fisura en el tiempo permite a Jake Epping, profesor de literatura en una pequeña localidad del norte de Estados Unidos, trasladarse en el tiempo desde 2012 a 1958 y regresar posteriormente al mismo punto de partida. Realizadas varias pruebas de ida y vuelta, Epping se propone corregir errores del pasado, evitar actos violentos y devolver la vida a víctimas inocentes.
Pronto descubre las dificultades y los fracasos en su empeño por enmendar la plana al destino pero, no obstante, decide aparecer en la ciudad de Dallas con el fin de detener a H.L. Oswald, el asesino del presidente Kennedy. Trata de sorprenderle antes de efectuar los disparos que el 22 de noviembre de 1963 acabaron con su vida. Conocedor de los hechos, vigila los pasos del criminal durante los meses que precedieron al atentado, sin revelar el motivo de sus acciones que despertaron las sospechas de las personas que le rodeaban. Junto a las peripecias del protagonista, cobra particular interés la recreación de costumbres y ambientes sociales de finales de los años cincuenta y primeros sesenta del siglo XX, vistos desde una perspectiva actual. Se comparan así las ventajas de la vida más tranquila y sencilla de aquellos años, con los inconvenientes de la falta de servicios higiénicos, sanitarios y de comunicaciones rápidas, de las que disponemos ahora. Stephen King (Portland, Estados Unidos, 1947) uno de los escritores del género de terror más famosos, muestra su maestría tanto en el perfil humano de los personajes como en las descripciones de época. El relato, basado en la conocida e imposible ficción de los viajes al pasado, logra mantener vivo el interés del lector hasta los episodios finales. Ciertas expresiones soeces y el relato de una escena de sexo empañan el buen tono general de la novela.

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