A TRAVÉS DE MIS PEQUEÑOS OJOS

Emilio Ortiz es invidente. En 2015 comenzó a publicar y en 2016 obtuvo el primer premio en la XI Edición de los Premios ANADE de cuento con el relato Las angustias de un dibujo. Posteriormente publicó con gran éxito de público en las redes sociales A través de mis pequeños ojos, un relato donde el autor vuelca sus propias experiencias en el día a día en la vida de un ciego junto a su perro guía. La editorial Duomo decidió publicarla en papel en diciembre de ese mismo año con una buena acogida por parte de los lectores.
Cross es un perro guía nacido y entrenado en Estados Unidos. Cuando cuenta con diecinueve meses intuye que ha llegado el momento en el que comenzará a ejercer el trabajo para el que ha sido preparado. Un grupo de cinco españoles invidentes llegan a la Escuela de entrenamiento donde pasarán un mes ejercitándose en la tarea de convivir con el perro guía que se les asigne a cada uno de ellos y que posteriormente se llevarán a España. Cross y el joven Mario formarán pareja. Desde el primer momento parecen caerse bien, pero deberán trabajar mucho para conseguir la coordinación que necesitan entre ambos. La fogosidad de Cross y la inexperiencia de Mario se enfrentan a un duro reto que perro y amo deberán superar.
La historia, escrita sin muchas complicaciones estilísticas, está narrada por Cross. Él será el cronista que desde su punto de vista de perro guía cuente las peripecias en su trabajo junto a su dueño y en un país diferente al suyo. El autor consigue trasmitir emotividad con un protagonista al que dota de unas cualidades humanizadas exentas de maldad y con sentido del humor. Los razonamientos que se le otorgan al animal buscan llegar al corazón del lector enterneciéndole y haciéndole olvidar que se trata de una ficción. La novela puede resultar conmovedora en algunos momentos, pero no logra pasar de reacciones meramente superficiales con una gran carga sentimental.

© Reseñas bibliográficas Fundación Troa