ADIÓS EN AZUL

Adios en azul es la primera novela, cuya publicación data de 1964, de la serie protagonizada por el excéntrico detective privado Travis McGee, profesional que elige sus clientes según las simpatías que le despiertan aunque tampoco desdeña el cobro de altos honorarios en función de los riesgos asumidos. Travis se enfrenta a un peligroso delincuente que abandona a la mujer con la que vive después de arrebatarle un valioso tesoro en piedras preciosas procedente de su herencia paterna. Las pesquisas le llevan a descubrir nuevas fechorías del personaje que, gracias a la fortuna robada, lleva una vida de millonario al tiempo que explota y abusa de las damas a las que atrae a su lujoso yate. Su constante ir y venir por las costas y puertos del sur de los Estados Unidos evita cualquier interferencia de la policía que pudiera seguir la pista de sus acciones delictivas. Después de liberar a una de sus últimas víctimas, Travis consigue reunir los datos necesarios para localizar el muelle en el que se refugia el yate del criminal y logra introducirse entre el grupo de personas que le acompañan en las travesías. Logra de este modo seguir los pasos del sospechoso con el fin de impedirle que cometa nuevas fechorías. John McDonald (1916-1986) considerado uno de los grandes maestros del género de novela negra americana del siglo XX, fue uno de los primeros en alternar los episodios de acción con otros en los que el protagonista descubre los rasgos humanos de su carácter. Destaca su sentido del honor, al mostrarse caballeroso con las damas hasta el punto de arriesgar la vida en defensa de sus intereses. Las tradicionales escenas de extrema violencia, propias del género, vienen acompañadas de referencias a la vida amorosa de Travis en las que el sexo aparece tratado, sin excesivos detalles, como expresión romántica de sentimientos y afectos al margen de consideraciones morales.

© Reseñas bibliográficas Fundación Troa