AFORISMOS E IDEAS LÍRICAS

Juan Ramón Jiménez ha sido uno de los escritores que, a principios del siglo pasado, ha contribuido al renacimiento del aforismo en el panorama literario español, después de un par de siglos de cierto ostracismo: “Soy amigo de la síntesis. Por eso prefiero la rosa a la rosaleda, el ruiseñor a la ruiseñora, el aforismo a la monserga ensayística, la lírica a la épica”. Los temas reunidos en esta selección de aforismos juanramonianos son muy variados, aunque hay cierta prioridad por los que tratan sobre la poesía y, más en general, sobre el arte.
Hay que tener en cuenta que Juan Ramón revisaba constantemente su obra y que los aforismos están escritos a lo largo de muchos años, por lo que, a veces, puede parecer que en unos se contradice un poco respecto a lo afirmado en otros. Son especialmente interesantes las reflexiones e intuiciones sobre la poesía y sobre la belleza, el estilo…, que ayudarán sin duda a comprender mejor la obra del poeta de Moguer, pero que nos informan también de su hipersensibilidad, de sus obsesiones y de cierto narcisismo y elitismo, más cultural y clasicista que social, como él mismo explica. También resultan certeros los comentarios sobre la crítica y los críticos, bastante mordaces.
Hay cierta absolutización de la poesía cuyo fundamento no está del todo claro, pues parece que se mueve entre el panteísmo y las ideas modernistas en boga entonces, aunque en los últimos años de su vida quizá se acercara más a los postulados cristianos. En cualquier caso, hay que tener en cuenta que se trata de aforismos, es decir, de textos breves y a menudo inconexos, por lo que no resulta fácil sacar conclusiones claras sobre las opiniones del escritor.

Luis Ramoneda