ALMIRANTE EN TIERRA

Una vez más, el oficial de marina inglés Jack Aubrey y su inseparable Dr. Maturin suben a un barco de Su Majestad, aunque para un viaje muy breve, ya que participan en el bloqueo del puerto de Brest, en Francia. Acabado éste y derrotado Napoleón, el futuro se les presenta incierto, pero las aspiraciones independentistas de los virreinatos españoles de América ofrecen perspectivas interesantes para los dos protagonistas.
La obra, muy similar a sus predecesoras de la misma serie, es una clásica novela de aventuras, que en este caso se desarrollan tanto en el mar como en tierra firme. La ausencia de combates en mar abierto se suple con referencias a problemas familiares, económicos y profesionales, que atañen sobre todo a Jack Aubrey, debido a su carácter fogoso y falto de habilidad para cuidar su propia carrera y la estabilidad de su hogar. La presencia de personajes habituales de la serie, el cambio de escenarios, la agilidad del estilo y la variedad de situaciones constituyen los recursos utilizados por el autor para hacer amena una historia que, en sí misma, no es de las más logradas ni importantes del conjunto, pero que se lee bien, sin excesivo lastre de términos náuticos, y entretiene. El contenido aúna el patriotismo británico, los prejuicios antiespañoles y las ligerezas religiosas y morales de los protagonistas, un tanto fríos en sus creencias y tolerantes en su conducta, pero todo ello se mantiene en un plano muy secundario dentro de la acción.

© Reseñas bibliográficas Fundación Troa