BOSQUES NEGROS, CIELO AZUL

Bosques negros, cielo azul es una novela de Eowyn Ivey, librera y periodista y escritora, natural de Alaska. La protagonista es Birdie, una madre soltera que vive en una cabaña con su hija Emaleen que siempre está con ella. Birdie es camarera en un hostal de carretera, se ve obligada a llevar a su hija al trabajo, le cuesta compaginarlo todo y su vida es difícil a pesar de que algunos vecinos la intentan ayudar, además de una amiga imaginaria, un hada libélula que es un personaje que ella ha creado en su imaginación. Un día Emaleen se pierde en el bosque y es encontrada por Arthur Neilse, un hombre algo extraño que habla suavemente y está considerado entre la población como un tipo raro. Birdie se enamora de él y se traslada con su hija a la cabaña que él tiene en un lugar lejano junto al río Wolverine, rodeado de naturaleza salvaje en una zona desértica y desconectada del exterior. Un ambiente que inicialmente les resulta delicioso ya que viven en absoluta libertad y los tres se dedican a pasear, nadar y recolectar. El amor impetuoso de la pareja se explicita en ocasiones en alguna secuencia sexual. Esta vida apacible se ensombrece poco a poco ya que Birdie desconoce el oscuro secreto de Arthur. La novela parece estar inspirada en el cuento de La Bella y la Bestia y la autora funde fantasía y realidad mediante una gran imaginación con la que construye una fábula rebosante de recursos y descripciones fantásticas.

TROA