CARTAS DE UN COMERCIANTE HECHO A SÍ MISMO A SU HIJO. 2: GRAHAM EL BASILISCO

Segunda parte de la selección de las supuestas cartas que un próspero industrial norteamericano escribe a su hijo con el fin de orientar sus primeros pasos en uno de los departamentos de la empresa que, a su debido tiempo, se verá obligado a dirigir. El autor continúa la serie epistolar de gran éxito que publicó a finales del siglo XIX en el periódico Saturday Evening Post, del que era director en esos años.
Lorimer atribuye las cartas a un tal Graham "El Basilisco", supuesto hombre de negocios que, salido de la nada, ha logrado una gran fortuna. En el título anterior las recomendaciones se referían a la época universitaria del hijo, mientras que ahora van dedicadas a guiar sus primeros pasos en el mundo de la empresa y en los problemas derivados de la vida social, de la familia y del matrimonio. El veterano hombre de negocios advierte a su hijo de los riesgos que comporta dirigir personas, a las que deberá tratar con sencillez y familiaridad, sin ceder ante las injusticias o las maniobras de los oportunistas que buscan su beneficio sin dar nada a cambio. Como buen padre, recomienda a su hijo firmeza sin caer en el rigor excesivo y amabilidad con todos, evitando incurrir en favoritismos hacia los aduladores que pretenden ascender escalones sin méritos propios. El estilo, sobrio y cuidado en la expresión, alterna el sentido del humor con el relato de experiencias personales que sirven de ejemplo para reforzar la oportunidad y eficacia de los consejos paternos.

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