CENTROEUROPA

Vicente Luis Mora (Córdoba, 26 de septiembre de 1970) es escritor de narrativa, poeta, ensayista y crítico literario, doctor en Filosofía y Letras por la Universidad de Córdoba. Con Centroeuropa, su última novela, ha obtenido el galardón de la decimotercera edición del Premio Málaga de Novela.
Corre el primer tercio del siglo XIX y Redo Hauptshammer, nacido en un burdel de Viena de padre desconocido, llega a una pequeña población prusiana junto al río Oder para tomar posesión de una tierra que le ha sido donada por el antiguo propietario. Es la oportunidad deseada para dejar atrás una vida a la que no quiere volver y un secreto que jamás debe ser revelado. En el carro que carga con sus pocas posesiones también transporta el ataúd con los restos de su amada esposa muerta un día antes por una bala perdida en un mercado de Maguncia. Una vez pasados los requisitos legales, Redo se instala en la pequeña cabaña situada en el terruño que ahora es suyo como primer campesino libre de Prusia, pero cuando se dispone a cavar la tierra para enterrar a Odra, su mujer, se encuentra con el cadáver congelado de un joven soldado prusiano. Vuelto a enterrar, al día siguiente, al disponerse a realizar la misma operación, descubre los cadáveres de dos soldados napoleónicos igualmente congelados. Posteriormente serán cuatro los soldados encontrados en una sucesión macabra que ya no le parece fruto de la casualidad. Puesto en conocimiento de las autoridades, será un tema difícil de resolver con el añadido del asombroso misterio de su perfecta congelación. Esta dificultad le granjea la simpatía de los habitantes del pueblo que le ayudan a desenvolverse en sus primeros pasos como agricultor haciendo amistad con algunos de ellos. Treinta años después contará su historia sin llegar a desvelar su secreto que, aunque lo intuye, el lector sólo podrá descubrir al final del relato.
Mora escribe una novela compuesta de tramas y subtramas para contar la historia de Redo, en la búsqueda de su propia identidad que se va desvelando de forma progresiva. El protagonista viene a ser un símbolo de una época en tránsito. Su propio optimismo, el gusto por aprender, las relaciones de verdadera amistad y de verdadero amor, desvela esperanza en la realización de Europa. En un empleo correcto de los tiempos en los que se desarrolla la trama, el autor utiliza imágenes propias del romanticismo como la muerte, el amor pasional de ultratumba, figuras fantasmagóricas o macabras, etc. Pero todo expuesto con una manera de narrar exquisita y un lenguaje acorde a la época en la que se ambienta la historia.

Encarnita Herraiz