EL ÁGUILA Y LA LIEBRE

Fábula en prosa cuyos personajes contrastan las ventajas de sus respectivas formas de vida. El águila presume de la sensación de libertad que produce volar alto, de ver brillar desde el cielo nocturno las infinitas luces de la tierra y de contemplar el mar. La liebre, en cambio, se alegra de conocer las plantas, las huellas de los animales, el olor de las flores, las raíces de los árboles y los agujeros de las madrigueras. Ninguna cede ante la otra pero luego, a solas, el águila intenta vivir a ras de tierra y la liebre se sube, a duras penas, a la copa de un árbol para ver el horizonte. Las dos acaban bastante maltrechas y arrepentidas de su intento de vivir de un modo que no es el suyo natural y se conforman con el que les corresponde, sin nuevos intentos de cambiarlo. Se trata de un cuento sencillo, de temática tradicional, escrito con estilo notable por la riqueza de vocabulario que emplea y con una moraleja muy clara. Las protagonistas aprenden, por dura experiencia, a disfrutar de lo que tienen a su alcance sin pretender imitar a otras especies animales ni envidiar los rasgos físicos que las definen. La presentación editorial acompañada el texto con ilustraciones de buena calidad.

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