EL JARDIN DE LAS BRUMAS

La juez Teoh Yun Lung, tras su jubilación y treintaicinco años de ausencia de Yuguri, en la jungla malaya, decide regresar para visitar, quizá por última vez, el lugar que compartió con el famoso jardinero japonés Aritomo, desaparecido en esa misma jungla en los años cincuenta.
Una vez allí, los recuerdos se presentan vívidos pugnando por una vida redimida de todo rencor intentando conseguir una paz interior que no llega. La terrible reclusión que sufrió en un campo de concentración japonés durante la Ocupación de Malasia en la Segunda Guerra Mundial, el sufrimiento que experimentó sobre sí misma y su hermana, ser la única superviviente de aquel campo de exterminio, el enfrentamiento con las guerrillas comunistas malayas, y la posterior relación con el misterioso japonés, planean sobre sus recuerdos intentando dar sentido a una vida reflejada en el jardín que ayudó a construir al afamado jardinero.
Escrito con un estilo poético donde lo trágico y lo bello se mezclan, el autor, de manera armoniosa, rodea las situaciones y diálogos de sonidos, colores y aromas, donde la naturaleza siempre está presente como parte integrante de la persona. Sobrecoge la capacidad del hombre para lo hermoso y lo terrible presentando la contradicción interna de cada uno a través de sus personajes. Las relaciones amorosas están sujetas a necesidad y con un sentido espiritualista propio de la cultura oriental que el autor presenta aquí de una manera sutil y delicada.

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