EL PINTOR Y LA VIAJERA

Novela biográfica inspirada en los últimos años de la vida del pintor francés Jean-Auguste-Dominique Ingres. La acción se sitúa hacia 1859, año en que tras un periodo de aislamiento, desgana y falta de deseo creador empieza a esbozar uno de sus últimos y más famosos cuadros titulado "El baño turco" ahora expuesto en el Louvre. La ficción novelística atribuye el retorno de la inspiración y de las ganas de trabajar a la relación de amistad y admiración que Ingres entabla por entonces con la famosa escritora epistolar inglesa lady Mary Wortley Montagu quien acompaño a su marido a Estambul cuando éste fue nombrado embajador británico en la capital turca. Los relatos que ella le haría de los baños que visitó en esta ciudad serían tan vivos que encendieron su imaginación y guiaron sus pinceles. Aunque esta dama no fuera contemporánea de Ingres, ya que nació en 1689 y murió en 1762, cinco años antes de que el pintor viniera al mundo, esto no impide a la autora imaginar una historia interesante que contrasta dos seres singulares, ambos con intereses artísticos muy marcados y fuerte personalidad. Los datos que sobre ellos se facilitan al lector son en términos generales, verídicos y están apropiadamente utilizados como eje del desarrollo argumental. La acción, basada en las conversaciones de los dos personajes centrales, transcurre con lentitud y su estilo está muy elaborado, a base de frases cortas de apariencia sencilla, pero con un contenido erudito que presta al texto un carácter claramente minoritario.

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