EL RELATO DEL INQUISIDOR

Durante una noche estrellada, en una posada medieval, se congregan personas de lugares diferentes y muy distintas entre sí, desde campesinos y juglares a guerreros o monjas. Sin embargo, hay algo que todos ellos tienen en común: un interés insaciable en tres niños y su perra. Estos muchachos son William, un chico enorme con una fuerza descomunal, Jacob, un niño judío que puede curar cualquier enfermedad y Jeanne, una cristiana con visiones del futuro. Gwenforte, la perra sagrada de Jeanne, que un día le salvó la vida, los acompañará en su aventura en la que deberán demostrar que pueden obrar milagros.
Adam Gidwitz es un profesor y escritor estadounidense que tuvo mucha fama con la Trilogía Grimm. Ha sido alabado por la crítica y ha ganado algunos premios literarios como la medalla Newbery en 2017, que reconoce especialmente a aquellos autores de relatos infantiles. Para esta novela estuvo investigando durante 6 años, recopilando historias en algunos viajes por Europa que hizo con su mujer.
Hatem Aly es un ilustrador egipcio que ha trabajado en televisión y junto con más autores infantiles, ilustrando libros muy reconocidos mundialmente.
En este conjunto de relatos muestra con estos personajes tan diferentes que la fe no depende de una apariencia física, sino que más bien es algo que se lleva dentro. Y quiere hacer entender la importancia de obrar bien aunque se tengan creencias diferentes. Estos niños las tienen y aun así enseñan el bien allá donde van, salvando a bandidos de una muerte a manos de un dragón, compadeciéndose de aquellos que en algún momento les hizo daño o rompiendo los prejuicios que se les atribuyen a ciertas personas por su apariencia física, por las leyendas falsas que se cuentan sobre ellas o por su condición social. Esta novela nos ayuda a comprender cómo debemos tratar a nuestros compañeros, amigos e incluso enemigos, poniendo siempre el respeto al prójimo por delante, y mostrándonos que a través de la aceptación podemos entender la realidad de los demás.
Cada relato es contado por un personaje diferente cada vez, lo que aporta una narración más rica en cuanto a formas de expresión. Además, muchas de las historias contadas son ciertas y este hecho inspira curiosidad en el lector que, gracias a las divertidas anécdotas que aparecen, devorará este libro con rapidez.

Emma Benito