EN CAMINO

El autor de este libro (París, 1848-1907) estuvo adscrito al naturalismo y el decadentismo literario, hasta su conversión al catolicismo. El protagonista de esta novela, de fondo claramente autobiográfico, a través de una reflexión ensayística sobre la música gregoriana y la arquitectura de los templos cristianos, narra su conversión. Comienza haciendo una crítica a la mediocridad de curas y católicos reflejada en su vulgaridad artística, y se extiende en el proceso que le lleva a hacer unos ejercicios en un monasterio de la Trapa, a sus escrúpulos y a sus pruebas místicas.
La narración es casi nula, pues el autor explica su conversión alternando el ensayo y la introspección de conciencia. Su personaje visita varias iglesias parisinas para encontrar el templo donde se cante el gregoriano de forma más pura y bella, y después, aconsejado por un sacerdote, va a la Trapa. A propósito de los ejercicios espirituales que allí hace, despliega sus conocimientos sobre las diversas órdenes, su regla, la mística, los grados de purificación, la noche oscura del alma, etc. Todo esto lo hace a través de una teoría artística empapada de fe, realmente notable y de una gran riqueza formal y material. Las críticas hacia algún elemento religioso son producto de una personalidad exquisita que deplora las limitaciones y las componendas Sus imágenes son audaces, tanto como su visión de la religión a través del arte. El léxico es opulento y muy culto, así como las ideas que expone.

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