HAMBRE ASESINA

Una noche, un hombre descubre el cadáver de su vecina, que ha sido asesinada. Se trata de la ex-mujer de un empresario multimillonario y dueña de una agencia de publicidad junto con una socia, que se convertirá en la principal sospechosa. Dos policías, encargados de resolver el caso, a lo largo de sus pesquisas descubrirán que otras muchas personas tenían motivos suficientes para cometer el asesinato. La lista de los sospechosos incluye a un ex-marido al que no le interesaba el divorcio, a un doble que éste utilizaba para su propia seguridad, a la mafia italiana e incluso a una hija de un matrimonio anterior.
La novela tiene un ritmo muy dinámico, muy adecuado a su género, donde no falta el policía tradicional, en este caso un comisario excéntrico, incapaz de mantener una relación duradera y, además, aficionado a la gastronomía. De hecho, normalmente el ámbito donde realizará la mayor parte de sus pesquisas será la mesa de los restaurantes. Al final del libro, como curiosidad, el autor introduce varias recetas y su elaboración. El modo y el orden como se suceden los acontecimientos mantienen la atención del lector hasta el final, alcanzando un buen nivel de entretenimiento.

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