IMPYRIUM

Primera entrega de una nueva serie de fantasía épica ambientada en un mundo futuro, surgido después de producirse un cataclismo en la Tierra como consecuencia del mal uso de la tecnología. Mientras se describe la creación de Impyrium y los reinos que la forman, gobernados por la tiránica dinastía Faeregine, ya desde el principio se apunta el conflicto central que impulsa la narración e involucra al lector desde las primeras páginas. Hazel, una niña albina de doce años, es la menor de las trillizas herederas al trono y con menos oportunidades de suceder a su abuela la emperatriz por su aspecto diferente, aunque sea la más dotada para la magia antigua, ya casi extinguida en las clases altas que la poseen. Cuando la anciana soberana debe nombrar sucesora, se producen asesinatos y atentados en la Corte que aterrorizan a la familia real. Hob, un chico de trece años procedente de una provincia lejana y salvaje, llega al palacio como sirviente y parece destinado, junto con Hazel, a salvar el reino de la rebelión que se está organizando. Una ambientación típica del género con un elenco de seres, que van desde lo demoníaco a extraños híbridos con poderes letales, sirve de telón de fondo a una trama consistente y bien articulada, donde las conspiraciones políticas se entrelazan con la formación de los jóvenes héroes. A la vez que se suceden peligrosos enfrentamientos con seres humanos y no humanos en escenarios cambiantes y misteriosos que ponen a prueba la valentía de Hob, surge un sentimiento de empatía entre el sirviente y la princesa Hazel, hecho que proporciona las escenas más entrañables y simpáticas en una lectura muy amena para un amplio abanico de edades.

© Reseñas bibliográficas Fundación Troa