JUDY MOODY. UN VERANO QUE PROMETE (SI NADIE SE ENTROMETE)

Los planes de Judy para pasar unas vacaciones de verano geniales tropiezan, nada más acabar el curso, con dificultades insuperables. Dos de sus mejores amigos se marchan lejos y los propios padres los dejan solos a ellos y a su hermano pequeño para cuidar de los abuelos. Quedan al cuidado del temible Stink y de una tía paterna un tanto extravagante e imprevisible. La obra narra los esfuerzos de la protagonista para sacar el mejor partido posible de las circunstancias adversas y los dudosos resultados que consigue. Al final, todos sus proyectos se vienen abajo pero surgen oportunidades con las que no había contado y el verano concluye mucho mejor de lo que empezó. La obra, décimo título de la colección protagonizada por la voluntariosa Judy, está escrita en un tono de humor disparatado muy del gusto del público infantil. Las situaciones se suceden a un ritmo sumamente dinámico, con intervención de elementos argumentales tan variados como originales y divertidos, dentro de su tratamiento desorbitado y fantasioso. Escrita con estilo sencillo, el relato cumple su propósito primordial de entretener a sus lectores. Sin embargo, de su contenido puede desprenderse la conclusión de que para pasarlo bien en vacaciones es preferible no fijarse unos objetivos de diversión tan concretos y exigentes que no dejen espacio para la improvisación.

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