LA LEY DE LA CALLE

Novela realista que retrata con crudeza la vida de Rusty James, un muchacho de catorce años, inadaptado social y de carácter violento, víctima de un entorno deteriorado al máximo en lo familiar y en sus relaciones de amistad. La historia comienza unos años después de la trama principal, cuando Rusty tras pasar todo un lustro en un reformatorio, se encuentra con su amigo Steve, al que no ha visto en todo este tiempo. Con estilo un tanto peculiar, por la profundidad de las reflexiones vertidas en diálogos aparentemente triviales, la autora, siguiendo la trayectoria de los personajes, se adentra en temas tan significativos para los adolescentes como son las pandillas, el liderazgo, las drogas, el alcohol, y toda una gama de conductas antisociales. Ambientada en la década de los sesenta y en los suburbios de una ciudad industrial próxima al estado de California, la trama transcurre desvelando progresivamente las circunstancias familiares que pueden justificar la conducta delictiva de Rusty y de su hermano mayor, un enigmático personaje al que llaman el Chico de la Moto. Abandonados por su madre, con un padre borracho, y viviendo en un barrio marginal donde imperan las peleas entre bandas, ambos muchachos se ven abocados a sobrevivir recurriendo a la violencia. Es una lectura fuerte, con un tono amargo y desesperanzado, que incluye escenas de sangrientas peleas callejeras, cuyo fin puede que sólo sea mostrar la realidad de unos sectores de población marginados y sin oportunidades.

© Reseñas bibliográficas Fundación Troa