LA NIÑA QUE SOÑABA LA BELLA DURMIENTE

Una niña de once años permanece en coma durante doce meses como consecuencia de un accidente del autobús escolar. Nadie sabe que puede oír lo que ocurre en su entorno; y así, desde su sueño, del que intenta salir y no puede, narra sus impresiones de modo sereno y esperanzado.Alrededor de este hecho la autora construye las historias paralelas, profundamente humanas, de las personas que la acompañan. Sin tristeza ni dramatismo, un compañero de clase, en sus visitas diarias -sugeridas por la maestrase propone ayudarla con lo que más le gusta: la lectura. El libro que estaba leyendo se convierte en protagonista, al serle leído día a día por su amigo y porque narra la historia del Caballero del Bosque y la Bella Durmiente, tan próxima a los sueños de los dos adolescentes en su vida real actual. El estilo sencillo y evocador, un misterio en torno a este libro que nadie conoce y que desprende un cierto halo mágico, la confluencia de sentimientos entre los personajes del libro y los dos muchachos, y un final feliz que se sugiere provocado por el cariño del chico, constituyen una lectura amena, agradable y constructiva, con un enfoque poco frecuente ante situaciones de este tipo.

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