LA OVEJA NÚMERO 108

La niña protagonista de este cuento tiene un problema: no se puede dormir. Bebió leche, leyó un libro, pero en lugar de dormirse se espabiló aún más. Se le ocurre entonces una nueva idea: contar ovejas, pensando que al llegar a la número diez seguro que el sueño la vence. Pero contó hasta diez, veinte, cien, y seguía sin dormirse. Al llegar a la ciento ocho tiene que para de contar porque la oveja que hace este número ha desaparecido. Las demás ovejas se enfadan, pero menos mal que la niña tiene la solución. La obra, bien escrita, cuenta con unas sencillas ilustraciones, de poco colorido y trazos muy suaves realizados a lápiz. Es un libro destinado a los primeros lectores o para leer en compañía de un adulto, y tiene un claro propósito educativo, referido a la adquisición de hábitos de sueño. Es una historia muy adecuada para contarla antes de dormir.

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