LA REVOLUCIÓN ROMANA

Estudio del período histórico correspondiente al final de la República y el comienzo del Imperio romano, fundamentalmente de la figura de Augusto y sus colaboradores. Syme, profundo conocedor de la historia de Roma, lo publicó en 1939, y ahora ha sido traducido por A. Blanco Freijeiro.
El estudio, erudito, amplio y detallado, está enfocado, más que a los hechos políticos, al estudio psicológico de los personajes y los móviles de su actuación, junto a un análisis de la sociedad, basándose en datos aportados por escritores coetáneos. El autor aporta novedad en sus juicios sobre la ascensión de Augusto al poder, abriendo perspectivas muy personales, pero siempre de interés. La traducción es muy buena, y la obra está bien elaborada, con notas, índices y cuadros.
La obra muestra cómo Augusto, que tuvo una rápida carrera política, lo sacrificó todo al poder, con los correspondientes vicios y defectos, pero también manifiesta algunas de sus cualidades. Lo mismo observa en los nobles que le apoyan y en las intrigas que urden, con medios deshonrosos, dando por sentado que la lujuria corría pareja con la crueldad para conseguir sus fines. La mención de la religiosidad es tangencial, porque en esta sociedad se daba escaso valor a lo religioso: la "pietas" hacía al romano tener "un cierto grado de connivencia con los poderes sobrenaturales", necesario para Roma si pretendía ocupar un lugar privilegiado en el dominio del mundo entero. En todo caso, se trataba de una actitud formalista más que espiritual.

© Reseñas bibliográficas Fundación Troa