LA SEÑAL

Maxime Chattam, maestro del thriller francés, regresa con una novela de terror inspirada en hechos biográficos y familiares. La señal desarrolla una trama escalofriante con guiños a historias clásicas de misterio y también a autores actuales como Lovecraft o Stephen King, a los que su autor cita.
La acción tiene lugar en una población de Nueva Inglaterra llamada Mahingan Falls, donde se traslada la familia Spencer en busca de tranquilidad y huyendo del stress neoyorkino. Tom, dramaturgo, y su esposa Olivia, presentadora de televisión, tienen tres hijos, dos de ellos adolescentes. Nada más llegar comienzan los extraños incidentes en su entorno y en la ciudad. La pequeña de la familia llora incansablemente, las llamadas telefónicas se interceptan con gritos de dolor, bandadas de murciélagos cubren el cielo y caen muertos de golpe, hay apariciones fantasmales, muertes sangrientas y desapariciones inexplicables.
En el hogar de los Spencer se multiplican los olores repugnantes y hacen su aparición unas ratas gigantescas y feroces; en el bosque cercano, un espantoso espantapájaros ataca a quien se acerca de forma que el lugar resulta aterrador. Tom y Olivia contratan a una niñera para que cuide a sus hijos y la joven correrá con ellos espeluznantes aventuras e incluso es atacada sexualmente por un desaprensivo. Los Spencer, totalmente desesperados, piden la colaboración de una médium que les describe una teoría rocambolesca acerca de lo que sucede. Mientras, el policía del pueblo tarda mucho tiempo en reaccionar y cuando lo hace se encuentra con una situación absolutamente anómala que le sobrepasa y no sabe cómo resolver.
Chattam siembra una intriga creciente con intenso ritmo y una estructura de capítulos cortos en los que en todos hay algún hecho aterrador y combina hábilmente trágicos sucesos y miedos reales con temores ancestrales: las brujas de Salem, elementos de ciencia ficción o curiosas teorías pseudo religiosas en las que incluso se niega la existencia del diablo. La señal es una novela oscura repleta de secuencias pavorosas, algunas de ellas muy desagradables, pero que refleja la extraordinaria imaginación y la maestría de Mattam para el horror.

Reyes Cáceres