LAILA WINTER Y LA MALDICIÓN DE ITHIRÏE

Tercer volumen de la serie, donde Laila Winter, después de descubrir su verdadera naturaleza y la de su madre, la Reina Serpiente, se enfrenta a la decisión más difícil de su vida: volver al mundo real o quedarse en el mundo mágico de Ithirïe para defender a su gente y a su tierra. Lo primero que se echa de ver en este libro es una trama intrincada, formada por varias subtramas, con distintos y numerosos personajes y variados escenarios. De ahí que cueste captar el hilo argumental, sobre todo si no se han leído los libros anteriores. Pero, por encima de todo, lo que predomina es la grandiosidad de los lugares mágicos, los extraños y llamativos personajes que pueblan los reinos del complejo e imaginativo mundo creado por la autora, y la atractiva personalidad de las protagonistas, que afrontan las aventuras más peligrosas, siempre contra algún tipo de mal que aparece confuso. El estilo, en buena parte descriptivo y de vocabulario rico, se combina con momentos de acción intensa y batallas cargadas de magia y efectos visuales. Intrigas políticas, un poco de suspense bien manejado, un accidentado romance y un fondo de amistad incondicional aportan algo de profundidad a un relato dirigido a un público muy amante de la fantasía y principalmente femenino.

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