LAS CRONICAS DE WILDWOOD

Novela fantástica que comienza con el secuestro de un bebé en un parque de Portland (Oregón). Su hermana de doce años, ve que el pequeño es llevado en volandas por una bandada de cuervos que se cierne súbitamente sobre ellos. Aterrada, corre siguiendo su rastro que pierde cuando los pájaros se internan en Wildwood, un territorio salvaje y misterioso en el que nadie se atreve a entrar
La obra narra con estilo sencillo y claro, las aventuras de la chica que, acompañada de un amigo de su misma edad, se lanza a la búsqueda de su hermano en un mundo extraño donde animales capaces de hablar conviven en plano de igualdad con seres humanos. Los protagonistas se enfrentan a una malvada y ambiciosa gobernadora que quiere sacrificar al niño en un ritual de magia negra que le permitirá hacerse dueña indiscutible de todo el territorio impenetrable. La acción, muy extensa y compleja, se desarrolla en dos planos paralelos debido a que los protagonistas se ven separados por la fuerza, nada más llegar a Wildwood. El chico queda en poder de la gobernadora, que intenta atraerlo a su bando con engaños, mientras que la niña se enfrenta a las trampas de un dirigente inepto que finge ayudarla pero no lo hace. Los dos personajes corren todo tipo de peligros, aunque perseveran en su propósito sin desviarse, con el apoyo de unos rebeldes que quieren librarse tanto de la gobernadora como de su incapaz oponente. La trama, de intriga, bien elaborada, combina elementos de crítica política con un enfrentamiento clásico entre el bien y el mal, cuyos términos morales recuerdan el pseudomisticismo difuso del movimiento Nueva Era.

© Reseñas bibliográficas Fundación Troa