LEJOS DE TOLEDO

Segunda parte de una trilogía sobre los judíos europeos en el siglo XX, cuyo autor (n. 1922), además de novelista, es guionista y realizador de cine. El primero de los títulos -que pueden leerse de forma independiente- es "Pentateuco de Isaac" (1998) y el último "Adiós Shangai" (2002). En este segundo, un judío búlgaro vuelve a su ciudad natal para dar una conferencia y explica, a través de capítulos alternos, el pasado de su infancia y el presente de la ciudad y de su barrio. Los retratos de las variadas gentes del tiempo anterior a la segunda guerra mundial tienen el sabor de la cariñosa nostalgia y de la verdadera mezcla de culturas, religiones y razas que se dio en Bulgaria: judíos, turcos, cristianos, musulmanes, gitanos, conviven en armonía, cada uno con su religión, lengua y costumbres. Pero llegan el comunismo, que impone un cierto modo de vida, y después la especulación inmobiliaria. Wagenstein usa un estilo agudo y socarrón y su capacidad poética para recrear una ciudad y una patria a las que ama, y el amor de los hombres por las mujeres bellas. El estilo humorístico hace que, cuando el autor trata a las religiones como el ateo y comunista que es, no resulte ofensivo. Un verdadero crisol de culturas se refleja con cierta poesía en este libro, después de una introducción del éxodo de los judíos expulsados de España por los Reyes Católicos hasta llegar a Bulgaria. Una lectura agradable y amplificadora de los propios horizontes.

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