NUNCA FALTA NADIE

La crítica literaria estadounidense Catherine Lacey debuta con una novela psicológica titulada Nunca falta nadie que arranca cuando Elyria, una joven de 28 años que vive en Nueva York con su marido, de quien esta distanciada, abandona repentinamente el hogar y se traslada a Nueva Zelanda con el único equipaje de una mochila. Allí viaja de población en población haciendo autostop en coches de desconocidos y duerme en parques y descampados. Es una huida hacia adelante en la que a pesar de que conoce a gente que le inspira más o menos confianza no comparte con nadie su intimidad ni la oscura carga que le pesa en torno al suicidio de su hermana y al recuerdo de su errática madre ya fallecida. Lógicamente se ve envuelta en diversas aventuras, algunas arriesgadas, pero contempla todo con indiferencia mientras interiormente siente una violencia soterrada a la que llama “ñu” que comienza a convertirse en obsesión. Su experiencia culmina cuando es atacada por una raya venenosa en el mar y es ingresada en un hospital. La noticia llega a oídos de su esposo que solicita su vuelta a Nueva York con el pretexto de ser una mujer potencialmente peligrosa de forma que el médico analiza a Elyria para descubrir algún rasgo de trastorno psiquiátrico antes de que ella regrese a su país.
Catherine Lacey dibuja en primera persona la mente de una mujer insatisfecha que decide romper su matrimonio sin que haya un motivo proporcionado y que tiene una gran determinación por salir de los raíles convencionales y explorar otros mundos. La intensidad y frescura estilística de la voz de Elyria ofrece interesantes reflexiones existenciales y muestran el error que supone pretender huir de la vida diaria ya que nadie puede desprenderse de su mente. La autora dibuja con esmero la compleja personalidad de la protagonista, su rebeldía y su maraña de sentimientos a través de una original habilidad en el empleo del lenguaje -el mejor elemento del libro- que da lugar a expresiones cargadas de un fuerte contenido metafórico. Novela innovadora y posmoderna que refleja gran talento y que ha sido aclamada por la crítica y ha recibido varias distinciones.
Catherine Lacey (Tupelo, Mississippi, 1985) ha cultivado diversos géneros literarios.

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