PREGUNTALE A ALICIA

Diario íntimo de una adolescente norteamericana de clase media, hija de un profesor universitario y la mayor de una familia de tres hermanos, que abarca desde los quince años hasta los diecisiete. En las anotaciones recoge el proceso de iniciación en la droga a través de unos compañeros de escuela, los alejamientos y recaídas que experimenta y la presión de otros drogadictos para anular su deseo de perder el hábito. Aunque anónima, la obra, según los editores, se basa en un diario escrito por una muchacha que murió a causa de una sobredosis.
Se trata de un documento escalofriante sobre el proceso de destrucción de un ser humano joven y lleno de posibilidades. Está escrito con fuerza y pulcritud, pero sin intención literaria. Lo que pretende es revelar el mundo sórdido a que pueden ser arrastrados los adolescentes por el atractivo prohibido de la droga. Su contenido es de un realismo despiadado. La descripción de las visiones producidas por los alucinógenos y de orgías sexuales bajo sus efectos, así como la narración de la infinita miseria moral a la que se puede llegar en plena adolescencia, incluso en la niñez, resultan impresionantes. La obra produce un gran efecto revulsivo e introduce al lector de modo casi brutal poco conocido en realidad. El acento de sinceridad que poseen hacen muy atractivas estas páginas, pese a su crudeza y léxico grosero. Junto a esto, hay fragmentos de escenas familiares de grato sabor ambiental e intensa carga afectiva. La obra persigue además otro objetivo:advertir que el ámbito de la droga es una "mafia" de la que es difícil salir, porque sus miembros acosan hasta provocar la caída definitiva del adicto.

© Reseñas bibliográficas Fundación Troa