ROSA CONTRA LOS GUARROCACAS

Rosa y otras niñas de su clase forman equipo para hacer un anuncio publicitario como ejercicio de la asignatura de lengua. Tras desechar muchos temas, deciden centrarse en la idea de que los dueños de perros recojan los excrementos que éstos dejan en calles y parques. La obra está escrita en tono humorístico, basado en la índole poco grata del tema tratado, y encierra un mensaje educativo referido a la eficacia de la publicidad y también a las trampas consumistas que sus mensajes encierran a veces. Su lectura resulta divertida por el modo ingenioso de desarrollar la acción, y el contenido proporciona una visión positiva del trabajo en común y una lección de conducta ciudadana correcta.

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