SERPIENTES EN EL PARAISO

La inspectora Delicado y su ayudante Garzón investigan un asesinato que ha tenido lugar en una pequeña urbanización de los alrededores de Barcelona: durante la reunión de tres matrimonios amigos, el cuerpo de uno de ellos aparece flotando en la piscina de la casa. Los investigadores encuentran serias dificultades para resolver el caso en un espacio muy cerrado.
El relato discurre dentro de los cánones clásicos: interrogatorios, autopsia, búsqueda de móviles y de pruebas, sospechosos que desaparecen de escena, acusaciones, contraacusaciones y unas amistades que se rompen pues todos sospechan de todos. La acción es algo lenta y el estilo está poco cuidado, pero a pesar de todo la novela resulta entretenida. Para abrir un poco el horizonte, la autora introduce otra pequeña investigación, cuyo resultado no es muy convincente, y, sobre todo, una supuesta visita del Papa a Barcelona que le lleva a hacer gala de su ateísmo, así como unos comentarios desafavorables por los gastos de la visita papal.

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