TE LO DIRÉ CON UNA CANCIÓN

Fani, estudiante de segundo de bachillerato, narra en primera persona los últimos meses en su ciudad de Belo Horizonte (Brasil) antes de viajar a Inglaterra para un intercambio cultural que durará un año. Con lenguaje natural y cuidado, la autora ofrece una imagen convincente de la vida y sentimientos de una típica adolescente en su vertiente amorosa y de amistad, dentro de un marco familiar y académico normal y responsable. Aunque el eje narrativo es una sencilla historia romántica, la trama se sostiene con las vivencias, preocupaciones propias de esa edad, amores platónicos, fiestas y pequeños detalles, que reflejan la personalidad y gustos de la protagonista, adicta al cine y con expectativas de iniciar esa carrera. Conseguir que el chico que toda la vida ha tenido a su lado vea que de la amistad se ha pasado al amor, supone para Fani, un auténtico ejercicio de ingenio que, cuanto menos, resulta entretenido y divertido, por la expresión de un sentimentalismo algo exagerado. Casi carente de argumento y centrada en lo cotidiano, es una lectura fresca y aceptablemente amena, con unos personajes sanos y sin complejos, claramente dirigida al público femenino.
Se intercala una escena de consulta a una vidente por medio del tarot, sobre todo para ver su futuro amoroso, pero se diluye en el contexto cultural brasileño.

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