UN BILLETE DE IDA

La novela, ganadora del Premio Goncourt en 1994, está protagonizada por un joven cuyos padres murieron en un accidente de carretera. Criado por unos gitanos marselleses, su nombre era Ami Six, el mismo del modelo de coche siniestrado. Esto condujo a que en sus papeles se le llamase Aziz y se le atribuyese procedencia magrebí. Una injusta acusación de robo provoca que le deporten a Marruecos.
Las aventuras de Aziz, entroncadas con la picaresca, son la caricatura irónica y fantástica de un mundo en crisis. Una sociedad en decadencia, enfrentada al paro y a la delincuencia, hace verosímiles historias tan absurdas y tristemente divertidas como la del protagonista, que debe recurrir a todo tipo de ficciones y disparates para sobrevivir. El autor (n.1960) ha concebido un argumento ingenioso, pese a ciertos fallos en el encadenamiento de los pasajes narrativos y a las caídas de tensión de la trama. Sin embargo, la obra consigue entretener e interesar por la problemática que encierra bajo la aparente desenvoltura de su estilo, y por la tristeza y desesperanza que late en la concepción de los pintorescos rasgos psicológicos que definen a los personajes centrales.
Paro o empleos frustrantes, amores que no duran, vacío interior, miedo al futuro y desarraigo configuran el entorno en que viven muchos jóvenes europeos. Esta desoladora situación, unida a alguna escena erótica- queda reflejada en estas páginas con fría lucidez y amargo humor, sin que el desenlace conduzca hacia la esperanza sino, todo lo más, a una triste resignación.

© Reseñas bibliográficas Fundación Troa