UN CORAZÓN SIN FORMA ALGUNA

La joven estudiante inglesa Hadley Dunn, protagonista de la novela, recibe una beca para asistir a un curso de literatura norteamericana en la universidad suiza de Lausana.
Fascinada por el encanto del lago Leman y las elevadas montañas que le sirven como telón de fondo, se sumerge de lleno en el grato ambiente académico, rodeada de jóvenes de distintas universidades europeas con los que establece una relación fluida. En particular con la simpática y alegre Kristina llega a intimar hasta el punto de intercambiar detalles sobre los problemas sentimentales que afectan a cada una de ellas. Mientras Hadley parece enamorada de su atractivo profesor, Kristina se plantea la ruptura con su novio al descubrir que se trata de un hombre casado. La tranquila vida universitaria se interrumpe con la muerte inesperada de Kristina al resbalar sobre el hielo cuando regresaba de noche a su residencia. El accidente, que la policía considera fortuito, despierta las sospechas de Hadley al recibir la confidencia de un testigo que atribuye la responsabilidad a un vehículo dado a la fuga. La joven inglesa se ve correspondida por el profesor de sus sueños que parece dispuesto a consolidar su relación con ella de modo formal. Sin embargo, al descubrir que el amante le ha ocultado el hecho de ser el causante del accidente de Kristina, le obliga a presentarse en la comisaría y asumir las consecuencias de su acción. La novela deriva desde un ameno relato centrado en los divertidos avatares de la vida estudiantil, a una sensiblera y devaluada trama próxima al género rosa. Muestra, sin embargo, una mayor calidad literaria tanto en las descripciones de ambientes y paisajes de Suiza, como en el perfil humano y psicológico de los personajes.

© Reseñas bibliográficas Fundación Troa