UNA TRILOGÍA PALESTINA

Gasán Kanafani (Acre, 1936 - Beirut, 1972) periodista palestino y activista político, uno de los fundadores del Frente para la liberación de Palestina, que murió en un atentado, está considerado como una de las voces más prestigiosas y renovadoras de la literatura palestina, a pesar de su corta producción literaria.
La publicación comprende una introducción al problema palestino y un epílogo que ayuda a interpretar las novelas, además de las notas a pie de página, necesarias para los lectores que no comprendan el árabe, tanto el idioma como las costumbres y la cultura. La introducción al problema palestino, aunque esté reforzada por datos históricos, no deja de ser una postura muy escorada hacia al lado palestino; teniéndolo en cuenta será ilustrativa para quien no conozca bien la situación.
El estilo del autor se separa mucho de la literatura occidental, no solo por el ambiente y el paisaje sino por la mentalidad de los personajes y de sus reacciones, así como su forma de expresarse. Si esto ocurre en la superficie, en estratos más profundos se puede encontrar una gran belleza, aunque no exenta de un elemento salvaje, en parte dado por el ambiente geográfico y climático y por los modos de vida. Todo se puede ver desde un trasfondo político y entonces toda la naturaleza se convierte en la metáfora del sentimiento de un pueblo que desde el establecimiento del Estado de Israel en 1948 no ha encontrado su paz y su lugar en el mundo, y viven en una continua amargura.
Una trilogía palestina, se compone de tres pequeñas obras publicadas en el espacio de seis años.
La primera, Hombres al sol (1963) es una historia muy dura, de tres hombres que intentan salir de los campos de refugiados, para ello tienen que contar con “pasadores” que por dinero, que generalmente no tienen, los explotan, y la mayoría de las veces los abandonan. En este caso el relato es totalmente dramático y el lector queda desolado. El calor es el gran protagonista, pero permanece la historia humana de los cuatro hombres que van en un camión cisterna: cada uno en un mundo, pero todos singulares.
En Lo que os queda (1966), relata la historia de Hamed y Mariam, dos hermanos a los que conocemos cada uno luchando por su vida, por la supervivencia, en un caso los elementos externos, el salvajismo del desierto; en otro, un marido que desea repudiar a su mujer y la maltrata de todas las formas posibles. La novela es singular ya que juega con el espacio y el tiempo, sin solución de continuidad y que para facilitar la comprensión, recurre a establecer las secuencias temporales con cambios de tipografía; recurso empleado actualmente en algunos tipos de novelas con la misma estructura.
La tercera, Um Saad (1969) es de otro carácter. Se sitúa después de la Guerra de los Seis Días, donde los ejércitos árabes fueron destrozados por los judíos, y el nacimiento de nueva postura palestina, contada por una mujer, cuyo hijo se ha convertido en fedayim: hay esperanza en el pueblo palestino, sin depender de nadie, siendo los amos de su destino.

TROA