EL DESTINO ERA ESTO

David Cantero regresa con una novela romántica y de trama policial titulada El destino era esto. La acción arranca en el Madrid actual cuando Patricia, una atractiva y famosa empresaria es secuestrada y, al parecer, está siendo acosada por alguien que le envía misteriosos correos electrónicos. La investigación recae en Damián Fuentes, un curtido inspector aunque de trayectoria algo gris y solitaria, ya que pasó su infancia en un orfanato y un recorrido de modestos oficios hasta llegar al trabajo actual en el que sobresale por su agudeza. A pesar de proceder de ambientes tan distintos y de su diferente personalidad, ambos congenian. Patricia debe viajar profesionalmente a Marrakech y no duda en que le acompañe Damián para protegerla. Allí, en una atmósfera exótica disfrutan inicialmente de una agradable estancia, surge cierta fascinación entre ambos, intiman y se cuentan sus trayectorias vitales. Pero desde el primer día Damián observa que son espiados y ella es objeto de un nuevo ataque en el que el inspector se empleará a fondo para salvarla. Tras el regreso a Madrid, ambos se distancian ya que aparentemente se ha resuelto el caso, pero las vueltas y revueltas de la vida harán que vuelvan a coincidir.
El autor presenta una trama que alterna elementos románticos con los típicos del género de acción: aventuras, violencia y cierta intriga. Con una narración lineal, ágil y sencilla desde el punto de vista estilístico, Cantero no perfila con demasiada profundidad a sus personajes, ya que lo que quiere resaltar es la idea de que el amor es imprevisible y puede pasar por encima de cualquier barrera social o de carácter. Es destacable la elegancia formal con la que se trata la relación sentimental de los protagonistas.

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