LA CREATIVIDAD ECONÓMICA

Ensayo que contempla una creatividad propia de la inteligencia económica que convive con otros tipos de inteligencias: científica, literaria, numérica, cinética, plástica, social, etc. Se plantea la creatividad como una de las maneras que la inteligencia tiene de resolver problemas, pero no la única. La creatividad es un arma de doble filo y no todas las innovaciones son buenas. En opinión del autor, parte de la crisis actual ha sido causada por innovaciones financieras. El libro muestra como el talento creador transforma lo imposible en improbable y lo improbable en realidad. Además, una persona con talento sabe distinguir los problemas que exigen una solución rutinaria de los que exigen una solución creativa. También explica las dos fuentes de la creatividad económica: la social y la individual. Una sociedad inteligente es la que favorece la aparición de poderosas inteligencias individuales capaces a su vez de mejorar la inteligencia de la sociedad. Igualmente, expone el proceso de la actividad creadora, etapas y competencias y aborda con ejemplos la creatividad fallida. Según el autor, la inteligencia económica debería constituir el consumo y el bienestar de otra manera. La mayoría de las veces no se tiene la solución a los problemas, lo único que se puede hacer es desencadenar la energía creadora que pueda encontrarla. Las sociedades se pueden encanallar y entonces la moral que produzcan será detestable. El libro ofrece un contenido interesante, enfocado desde lo antropológico, que invita a la reflexión y considera la generosidad como el fundamento de la creatividad.
Sus autores, José Antonio Marina y Santiago Satrústegui. Investigador, experto en inteligencia y director de la Universidad de Padres; y asesor financiero, respectivamente.

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