LA MUJER QUE LLEGÓ DEL MAR

Martin Conrad es un escritor que, tras varios éxitos, se repone de un fracaso literario y decide trasladarse de Londres a Redmondtow (Irlanda) en busca de inspiración. Allí conoce a Amanda Coleman, una atractiva pelirroja, directiva de una importante empresa, que despierta su interés ya que conoce una misteriosa historia ocurrida en el pueblo años atrás acerca de una mujer alemana, Eva, que apareció flotando en el mar como consecuencia de un naufragio, totalmente desmemoriada. Las conversaciones entre Amanda y Martin, ambos divorciados, le van dando a este un estupendo tema para su nueva novela ya que se trata de un extenso e intrigante relato en torno a varias sagas familiares relacionadas con el comienzo del dominio nazi y, posteriormente, del inicio de la segunda guerra mundial. La historia de Eva es durísima y compleja pues fue víctima de un cruel gendarme de la Gestapo que la persiguió durante mucho tiempo. Una historia cuajada de desarraigo y violencia, también de tipo sexual, en la que hay injusticias, venganza, rencillas familiares, ambición, hijos ilegítimos, etc., pero también de amor y capacidad de rehacer una vida. Una trayectoria que, sorprendentemente, tiene conexión con Amanda.
El libro tiene dos ejes entrecruzados: por un lado la actual de Amanda y Martin, plasmada en breves diálogos, que resulta algo convencional y, por otro, la temática del pasado que es el núcleo de la escritura de la novela, dos planos que se alternan constantemente. La historia de Eva ofrece más fuerza narrativa y presenta unos personajes aceptables. Quizá el argumento se complica demasiado y la abundancia de acontecimientos dramáticos, junto con el amplio elenco de secundarios, sea excesivo. La ficción se construye a la luz de los hechos históricos y con la recreación del ambiente de Irlanda, un país neutral durante la segunda guerra mundial aunque dividido entre su odio a los nazis y su proverbial antipatía hacia los ingleses. La autora hace hincapié en destacar sentimientos nobles y no se detiene en describir detalles escabrosos de ningún género aunque el clásico escenario de la barbarie nazi contra los judíos da lugar a brutales secuencias, incluida alguna violación.
Mercedes Guerrero (Aguilar de la Frontera, Córdoba, 1963) es empresaria y escritora.

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