NIÑA DE POLVO

Novela que narra la historia de una familia libanesa a través de la mirada de una niña de seis años, ingenua y alegre a pesar del sombrío entorno que la rodea: la depresión de su padre, las lamentaciones de su madre y las rebeldías de su hermano mayor, que ella quiere compartir. Vive con ellos una tía africana que mantiene el buen ánimo en el hogar. El telón de fondo es la guerra del Líbano, que les acarrea penurias de todo tipo y la angustia de continuos bombardeos, en uno de los cuales su hermano es herido gravemente por correr una peligrosa aventura.
La historia, probablemente autobiográfica, está muy bien traducida y mantiene un estilo sobrio, con fuerza expresiva y a la vez cargado de lirismo. Resulta muy colorista, sin ninguna concesión al barroquismo, en la descripción del mundo árabe. La caracterización de los personajes es muy acertada, con toques intimistas que le dan un encanto especial. Se resaltan la bondad, los valores humanos, la capacidad de amar y rectificar, así como la consistencia de los lazos familiares. Aunque el tema es duro –de hecho, los sufrimientos arrancan algún detalle irreverente respecto a lo religioso- y la violencia está presente a lo largo del libro, el modo de afrontarlo es esperanzador, siempre a través de la visión limpia de la infancia. La autora mantiene la independencia y no toma partido por ningún bando en el conflicto.

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