UNO ENTRE UN MILLÓN

Monica Wood es autora americana de ascendencia irlandesa y nacida en Maine, lugar donde se desarrolla Uno entre un millón, su última novela y la primera traducida al español. Conocida cantante de jazz, country, pop y góspel en Nueva Inglaterra, ha sido capaz de plasmar con acierto la psicología artística musical de uno de los personajes principales de la historia.
Un pequeño boy scout de apenas once años tiene asignada como misión ayudar a una anciana de ciento cuatro para que le ayude en las tareas de la casa y del jardín. Ona Vitkus, de origen lituano y con plenas facultades, conecta enseguida con el niño amable, educado, obsesionado con los récords Guinnenss y con la curiosa peculiaridad de que todo ha de numerarlo. Tras dos semanas de ausencia del muchacho quien aparece en la casa de la mujer es su padre, Quinn Porter, un guitarrista de rock que ha sacrificado siempre a la familia en favor de su carrera musical. Él le dará a Ona la noticia del repentino fallecimiento del niño y la decisión de terminar lo que éste había comenzado durante los siete sábados siguientes. Lo que supone para Quinn una tarea irrenunciable impuesta por su exmujer se convertirá para él en un lento camino hacia el arrepentimiento y el perdón a través de la vida incoada, y para él desconocida, de su propio hijo.
La narración de Monica Wood carece de artificios pero no por ello deja de trasmitir una sensibilidad extraordinaria. Sin pretender arrancar al lector una lágrima fácil, ni llevarle por sendas cargadas de dramatismo, es capaz de llegar al corazón con una ternura que no requiere de palabras porque los pequeños gestos, aparentemente inútiles, son capaces de mostrar una calidez llena de matices. Escrita con inteligencia, es el personaje del niño ausente quien cobra todo el protagonismo, quien provocará los cambios de conducta más radicales en los demás, quien esparza la semilla de una esperanza llena de optimismo que dará sentido a cuanto les rodea.
La fidelidad, la honorabilidad, la amistad, el arrepentimiento de los propios errores y la subsanación de ellos como redención se ponen en valor a lo largo de la novela. Cada uno de los personajes tendrá que recorrer su propio camino interior para conseguirlo.

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