LA CASA THÜRINGER

Adrián Zograffi es un joven de 17 años, cultivado e intelectual, que comienza a trabajar como chico de los recados en la casa de la familia Thüringer. Dicha familia ha logrado cierta posición social y económica constituyéndose como una familia de los "nuevos ricos" de Braila.
No obstante, presenciamos la decadencia de una sociedad anclada en lo tradicional con la inserción paulatina y constante de ideas socialistas, sindicalistas y reivindicativas en el pueblo. Adrian comparte este pensamiento y favorecerá, ante el creciente desarrollo industrial en el puerto de Braila, su difusión. Comenzarán a tener lugar huelgas, actos delictivos y de corrupción, y un irremediable empobrecimiento de las familias burguesas.
Adrian, alter ego de Istrati, se desencanta ante la evolución de los hechos. Deambula entre el idealismo y la realidad que le rodea. Se percibe este mismo desequilibrio en sus relaciones amorosas: una, puramente carnal con la criada Júlia, y otra, de índole platónica y sublime con Ana, señora de la casa. De este modo, se debate entre profundos dilemas que le dejan entrever su desorientación hasta tener una crisis de conciencia.
Panait Istrati fue un escritor rumano escondido en el olvido y el descrédito debido a la publicación de Rusia al desnudo en la que relataba su estancia en la URSS reflejando su desilusión y la próxima desestalinización. Apadrinado por el escritor francés Romain Rolland, fue un autor prolífico especialmente en lengua francesa y ejerciendo de traductor de sí mismo en algunas obras. Recibió el título de "El Gorki de los Balcanes" y se caracteriza por una prosa lírica y vibrante, en ocasiones apasionada e impregnada de experiencias vitales, folclore balcánico y cierto aire europeo de influencia francesa. Su escritura oscila entre la autobiografía y la visión crítica.

Elvira Lorenzo