LA NIÑA DE LOS GORRIONES

En 1958 el dictador comunista de China Mao Zedong ordenó a los campesinos de su país organizar un exterminio de gorriones, culpándolos de la mala cosecha de trigo de ese año. La orden se cumplió pero, sin gorriones que se las comieran, la población de langostas se multiplicó y provocó una plaga que mató de hambre, a lo largo de tres años, a cerca de cuarenta millones de personas. La obra se inspira en este hecho real para narrar la historia de una niña que siente pena por los pájaros y logra salvar y esconder a algunos, con lo que, en primavera, salva las cosechas de su pueblo. La obra está bien escrita y bien ilustrada, pero su temática, sobre la desobediencia civil ante el absurdo del poder tiránico de los dictadores, excede la capacidad de comprensión del público al que se dirige. Por otra parte, las ilustraciones, de tonos apagados, transmiten impresión de tristeza, aunque sean de buena calidad artística.

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