UN MUNDO AL ALCANCE DE LA MANO

Maylis de Kerangal centra su nueva novela Un mundo al alcance de la mano en la figura de la protagonista, la joven parisina Paula Krast, que en 2007 deja a su familia para ir a estudiar al instituto de pintura de la Rue du Métal en Bruselas donde se especializa en trompe-l'oeil o el arte de la ilusión y de reproducir minerales, plantas y animales.
Paula comparte habitación con Jonás, un decorador con quien mantiene una relación sentimental y Kate, tres compañeros entre los que se crea una fuerte amistad, intensificada por su amor al arte. Paula viaja más tarde a las afueras de Roma, a Cinecittá, para trabajar en los decorados de Habemus Papam de Nanni Moretti y allí vive una efímera aventura con un italiano. Posteriormente, se traslada a Moscú a colaborar en los decorados de una nueva versión de Ana Karenina. La última escala profesional de Paula se desarrolla en las paredes pintadas de las cuevas de Lascaux y la historia se cierra en 2015 con el atentado contra Charlie Hebdo.
La autora sostiene el relato con un ritmo musical y vertiginoso a lo largo de una trama muy centrada en aspectos técnicos y artísticos que describen la actividad profesional de la protagonista y que Mayling entrelaza con aspectos vitales, familiares y románticos. La novela, escrita desde el punto de vista de una mirada omnisciente, está muy bien documentada y resuelta con un lenguaje elegante, sensorial y preciso como si se tratara de una obra de orfebrería de forma que se traslada la minuciosidad del arte al estilo narrativo.
La belleza que Maylis de Kerangal transmite adopta un tono muy sensual, tanto en las cuestiones artísticas e intelectuales que constituyen la temática fundamental como en los aspectos amorosos, que en esta obra quedan algo reglados a un segundo plano.

Reyes Cáceres