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SE HABLA DE ELLOS
SL
Si no sabes la letra
tararea
Blanca Marais
Maeva | 455 págs. | 22 €.
En la Sudáfrica
de 1976, en
plenos años del
apartheid, está
ambientada esta
novela de ficción
basada en hechos
históricos. La
historia se cuenta
a través de dos
voces diferentes:
la de una imaginativa niña blanca de
seis años, Robin Conrad, que vive en
Johannesburgo, y la de Beauty Mbli, de
etnia xhosa como Mandela, que vive
pobremente en Soweto.
Cuando surge la revuelta entre
blancos y negros, mueren los
padres de Robin y la hija de Beauty
desaparece en la refriega sin dejar
rastro. La niña queda al cuidado de su
tía, pero esta viaja constantemente y
a través de un conocido consigue que
Beauty venga a su casa a cuidar de
ella. Tras el rechazo inicial de Robin
por prejuicios raciales, entre ambas
surgirán fuertes lazos de cariño.
Beuty vive obsesionada por encontrar
a su hija, mientras Robin juega con
sus amigos, lee y también se dedica
a espiar, tarea que le será útil en lo
sucesivo. La violencia del país sigue
vigente y se desencadenan una serie
de acontecimientos, trágicos en su
mayoría.
Este intenso relato trenza dos historias
de gran calado humano a través de
dos miradas muy distintas pero que
acaban fundiéndose. El libro, que
presenta con realismo la injusticia de
la segregación racial, trata todos los
temas elegantemente y en ocasiones
muestra conductas ejemplares de
lealtad y heroísmo.
•
La hermosa burócrata
Helen Phillips
Siruela | 190 págs. | 16,95 €.
Helen Phillips, joven escritora
norteamericana, es la autora de
esta novela vanguardista con cierto
eco
orwellian
o. Josephine reside en
una ciudad sin nombre y tras una
temporada de desempleo comienza a
trabajar como administrativa en una
peculiar empresa cuyo edificio carece
de ventanas.
Su tarea consiste en trascribir
rutinariamente unos misteriosos
códigos de números en una
interminable base de datos. Con su
marido, Joseph, vive una situación
paupérrima de suburbio en suburbio,
en miserables casas donde carecen
de lo más esencial. Josephine acude
inicialmente ilusionada a trabajar a ese
zulo que es su despacho, pero pronto
es testigo de extraños sucesos y raros
comportamientos de sus enigmáticos
colegas casi invisibles.
La pareja está
deseando tener
un bebé, por eso
a ella le inquieta
no saber dónde
trabaja Joseph
y le preocupan
sus imprevistas
desapariciones
sin saber dónde
se encuentra,
algo que le angustia y le hace recelar.
Además, en su domicilio recibe
intrigantes mensajes de procedencia
anónima. Un día descubre un dato
significativo al que le sigue la pista
e intuye algo de lo que puede
esconderse tras ese rompecabezas de
números que ella teclea diariamente.
La novela avanza con un ritmo
vertiginoso, casi de
thriller
, y que
culmina en un final sorprendente.
Historia bien escrita, a veces gratificante
y a veces angustiosa, que atrapa al
lector y le induce a reflexionar acerca de
la deshumanización laboral, del poder
sobre la vida de otros y otras cuestiones
de calado acerca de la exigencia
humana.
•
Pierre Bost
Errata naturae | 88 págs. | 12 €.
Sobre esta novela de Pierre
Bost (1901-1975), el director
francés Bernard Tavernier rodó
una película, con música de
Fauré y con el mismo título. Se
centra exclusivamente en un
día de domingo. Transcurre en
las afueras de París, donde se
ha instalado el pintor Monsieur
Ladmiral, muy cotizado, viudo y
ya anciano. Su única ilusión es el
contacto con sus dos hijos, que
van a visitarle ese día de domingo.
La relación no es igual con
ellos. A Gozague, que le visita
con su mujer y sus tres hijos,
le soporta porque no hay más
remedio. Gonzague, chapado a
la antigua, ceremonioso, siempre
preocupado, más bien gris,
está pendiente del padre y está
inquieto por los avances de la
edad. La tarde del domingo recibe
también la visita de su hija Irène,
que no tiene nada que ver con
su hermano. Es viva, moderna,
lanzada, aventurera… Vive sola en
París, tiene una tienda pero poco
conocen de su vida social y sus
relaciones personales.
La novela es una estampa muy
viva sobre el paso del tiempo y
las relaciones familiares. El autor
se limita a describir movimientos,
acciones, tenues reflexiones,
conversaciones…
•
Un domingo
en el campo
TROA
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