¡MÁRTIR!

Primera novela del poeta iraní-estadounidense que, con Cyrus su protagonista, da la impresión de que el autor refleja experiencias y rasgos autobiográficos.
A través del hilo conductor de Cyrus protagonista principal, la trama nos relata, alternando de manera original, tanto episodios de éste como de los principales personajes, estén vivos o muertos, así como los sueños o pesadillas de aquel, sin atender a la lógica de tiempo-espacio.
La historia se desarrolla en Estados Unidos, donde está instalado un joven iraní viudo que trabaja en una granja industrial limpiando pollos para que su hijo pueda ir a la universidad. El hijo, Cyrus, iraní pero ya también estadounidense, desde temprana edad consume alcohol de manera habitual así como otras drogas de abuso y/o psicofármacos, describiéndose de manera minuciosa tanto los efectos degradantes que producen, como los efectos delirantes y/o fantásticos. Todo ello descrito con un lenguaje soez y un ambiente sórdido y pesimista que el autor intenta dulcificar con algunas frases de “prosa poética”, que resultan insuficientes como contrapeso, y pueden resultar artificiosas.
Al mismo tiempo se introducen en la novela temas de calado, como los sentimientos de rechazo que pueden sufrir las personas emigrantes, lo patético de las guerras como la de Irak, los gobernantes que propician estas guerras, o el culto de mártires que se da a los musulmanes de cualquier edad, que han muerto por sus principios religiosos; el sentido de la vida y de la muerte, el suicidio, el más allá, la religión, Dios, pero dejando todos estos temas abiertos y con una visión sólo descriptiva.
Ante la desolación de la vida tan absurda el autor recurre, quizá para amenizar la novela, a variadas relaciones amorosas entre los personajes de la novela.
Una novela original, más por la estructura que por el contenido, con un matiz claramente reivindicativo en varios aspectos, endulzado con la pretendida belleza de una fantasía artificial poco convincente.

TROA