MUERTE POR AGUA

El Premio nobel de literatura de 1994, Kenzaburo Oé, nos ofrece una novela con tintes autobiográficos, en la que relata el universo interior y exterior de un escritor de fama, el señor Kogyto Choko, que recibe, una vez muerta su madre, un baúl rojo que contiene diversos recuerdos de su padre, que murió ahogado. El contraste entre el mundo del padre, el imperialismo japonés de los valores tradicionales, y el nuevo mundo que representan los jóvenes de “The Cave man”, un grupo de teatro alternativo que se especializa en la obra del señor Choko, se convierte en una encrucijada para el protagonista que, además, vive en un complejo mundo familiar en el que destaca su hijo Akari, discapacitado intelectual y apasionado de la música clásica. El señor Choko se ve atrapado en el dilema sobre cómo continuar su obra “La novela por la muerte de agua”.
Esta nueva obra de Kenzaburo Oé está cargada, como toda su obra, de un eficaz simbolismo. Desde la Casa del bosque, la vivienda de referencia familiar, hasta los títulos de las obras que componen la trayectoria literaria del protagonista, nos remiten a un juego permanente que nos introduce en la metaliteratura, la literatura sobre la literatura. El simbolismo omnipresente adquiere su sentido a partir de la búsqueda de la explicación del fallecimiento de su padre, como si la vida consistiera en la perdida, por ahogamiento, de los proyectos vitales. En el trasfondo de esta novela se conjugan un nihilismo sutil con una actitud pasiva ante la existencia, solo remediada por la pretensión de convertir el sentido de lo que hacemos en una representación teatral. Un teatro cuyo valor radica en que lso espectadores participen espontáneamente en el desarrollo de la obra. Hay que destacar la ausencia absoluta de la dimensión transcendente de la vida, con lo que las cuestiones referidas a la culpa y la redención se vacían.

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